¡Pero qué jugones!

Hoy, me siento nostálgico y me gustaría hablaros de esos videojuegos que marcaron infancias, yo a diferencia de muchos miembros de la forja nací en los años 90, por lo que no pude disfrutar plenamente de esos juegos clásicos como el Monkey Island o el Doom, aunque seguramente se llevarán alguna entrada en su momento. Hoy vengo a hablaros de esos juegos que jugábamos los chavales de mi época con las primeras consolas que se iban lanzando, como Nintendo 64 o la Play Station 1, mítica. Vamos a hablar hoy de un juego de Play Station 1 que yo jugué en su momento y marcó mi infancia de manera significativa.

Spyro the Dragon fue el primer videojuego que jugué en mi vida y también fue el primero que acabé completamente, un logro personal ya que tenía 5 o 6 años cuando lo jugué.
Este juego, el primero de la saga, ha sido el único al que he jugado de Spyro me gustó muchísimo pero no sé por qué no me dio por seguir con los juegos siguientes, seguramente no sabía ni que existían xD
Spyro the Dragon nos pone en la piel de Spyro, una cría de dragón de color morado que está aprendiendo todavía como ser un dragón, sabe planear y escupir pequeñas llamaradas, cuando el malvado Gnasty Gnorc y su ejército,que parecían ranas u orcos, transforma a todos los dragones del mundo en estatuas de cristal, y hace que sus soldados orcos se conviertan en gemas cuando mueran.

Spyro no se vio afectado por el hechizo de Gnasty y acompañado por su libélula Sparx debe liberar a los dragones y acabar con el malvado Gnasty Gnorc. El objetivo del juego es ir avanzando por diversos mundos hasta llegar al mundo final de Gnasty Gnorc y acabar con él.
Para pasar de un mundo a otro debemos hacer diversas misiones que nos dirán los conductores de globos aerostáticos o aeróstatas. Las misiones consistían en reunir un cierto número de gemas, de huevos de dragón o liberar a un número de dragones.

A medida que avanzábamos de un mundo a otro se nos ponían las cosas más difíciles y los enemigos se volvían bastante más difíciles de matar. En cada mundo teníamos un boss final que era opcional de matar, a excepción del último mundo donde el boss final era obligatorio.
Yo recuerdo con gran nostalgia las horas que jugaba controlando al pequeño dragón matando orcos y saltando de una plataforma a otra. La verdad es que el juego era bastante complicado, recuerdo con terror ciertos mundos que eran muy complejos pero a pesar de ello conseguí pasármelo.
Además de avanzar matando a estas ranas mutantes podíamos hacer misiones opcionales en las que podíamos volar con Spyro e ir pasando por medio de círculos y demás, pero a mí no se me daban en absoluto bien esos niveles xD
Cada mundo de juego estaba estructurado con distintos portales que nos llevaban a otros subniveles que debíamos pasar para avanzar en el mundo, la diversión no tenía fin.

El juego tuvo muy buenas críticas, ya que fue de los primeros juegos de plataformas que salieron en 3D. Spyro fue de la mano de Crash Bandicoot, otro genial juego de esta época y al igual que éste último, Spyro recibió buenísimas críticas y la mayoría de las notas de revistas de videojuegos lo situaban en un 9/10.
Actualmente el juego se puede comprar en Play Station Store por 5€, yo no creo que me lo compre pero seguro que a algún nostálgico le encantará volver a pasarse este mítico juego.

Os dejo un video del primer mundo, a ver a cuántos les da un ataque de nostalgia como el que me dio a mí xD

Un saludo!!